En un hecho histórico para el desarrollo educativo y social de la región, la Universidad Tecnológica de Izúcar de Matamoros (UTIM) y el Instituto de Educación Digital del Estado de Puebla (IEDEP) formalizaron este martes un convenio de colaboración estratégica. El acuerdo, firmado ante autoridades académicas y gubernamentales, busca potenciar el acceso a una educación integral, tecnológica y adaptada a las demandas laborales actuales, beneficiando a estudiantes, docentes y personal administrativo de ambas instituciones.
Con la presencia del rector de la UTIM, Mtro. Sergio Valero Orea, y la directora general del IEDEP, Arq. Juana Marmolejo Sánchez, el acto protocolario contó también con el respaldo de Eira Brito González, jefa administrativa de la Corde 07, quien destacó la relevancia de esta unión para fortalecer la infraestructura educativa en la zona mixteca poblana.
El convenio, alineado con las políticas públicas impulsadas por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y el gobernador Alejandro Armenta, prioriza un enfoque humanista y de bioética social. Entre sus ejes destacan tres beneficios clave: acceso a programas académicos flexibles del IEDEP para estudiantes de la UTIM, descuentos en capacitaciones para el personal universitario y la creación de planes de estudio vinculados a las necesidades del mercado laboral.
Valero Orea subrayó que esta alianza “no solo democratiza la educación, sino que construye puentes para la movilidad social”. Por su parte, Marmolejo Sánchez enfatizó que la digitalización educativa “es una herramienta para reducir brechas y garantizar equidad”. Ambos coincidieron en que el acuerdo responde a una visión de futuro, donde la tecnología y la inclusión son pilares para el desarrollo comunitario.
La firma de este convenio marca un precedente en la cooperación interinstitucional en Puebla. Con estrategias centradas en la pertinencia académica y la accesibilidad, la UTIM y el IEDEP proyectan no solo transformar trayectorias individuales, sino también tejer una red educativa que fortalezca el tejido social de la región. El compromiso, más allá de las aulas, se consolida como un faro para la construcción de oportunidades en una de las zonas con mayor potencial de crecimiento del estado.