**“Exhortamos a mantener los campos limpios, especialmente con estas lluvias. Así optimizamos nutrientes y aseguramos buenos rendimientos”**
Juan Rubio
Chietla, Pue.
Odilón Méndez Paredes, encargado de Siembras y Cultivos del Ingenio de Atencingo, destacó dos prácticas esenciales para garantizar el rendimiento en los campos de caña: la fertilización oportuna y el combate riguroso de malezas. Tras la última zafra, subrayó la urgencia de aplicar nutrientes y herbicidas, para proteger el cultivo durante la temporada de lluvias.
En diálogo con este medio, Méndez Paredes detalló que la primera fertilización debe realizarse al fondo del surco, con 500 kilos por hectárea de mezcla física 20-10-10, complementada con electo para controlar el picudo. “Nutrir las cañas es fundamental” afirmó. Como segunda y tercera etapa, recomendó 300 kilogramos de fórmula 20-10-20 y 400 de sulfato de amonio.
Respecto al control de malezas, explicó que la limpieza es “básica” para evitar pérdidas. Sugirió aplicar herbicidas como Orión (2 L/ha) con Proponit (1.5 kg/ha), o bien Versanti ( 5 L) mezclado con Diuron (3 kg), para eliminar hojas anchas y angostas. “Si descuidamos la limpieza 30 a 60 días, perdemos hasta 40% del rendimiento. Las malezas roban nutrientes y agua, asfixiando el cultivo”, puntualizó.
Méndez Paredes hizo un llamado a los productores: “Exhortamos a mantener los campos limpios, especialmente con estas lluvias. Así optimizamos nutrientes y aseguramos buenos rendimientos”. La negligencia, insistió, no solo reduce la productividad, sino que encarece el manejo del cultivo a largo plazo.
