Autoridades surcoreanas incautaron aproximadamente dos toneladas de cocaína en un buque de carga noruego que zarpó de México, marcando la mayor incautación de drogas en la historia del país asiático.
Ruta del buque: de México a Corea del Sur vía Ecuador, Panamá y China
El buque M/V Lunita, con bandera noruega y tripulación filipina, partió de México y realizó escalas en Ecuador, Panamá y China antes de arribar al puerto de Okgye en Gangneung, Corea del Sur.
El 2 de abril, las autoridades surcoreanas localizaron un importante cargamento de cocaína a bordo de un granelero de bandera noruega, durante una operación conjunta entre la Guardia Costera y el Servicio de Aduanas.
La embarcación, que había salido de México, hizo escalas en Ecuador, Panamá y China antes de llegar vacía al puerto de Okgye, en la ciudad de Gangneung, Corea del Sur, donde planeaba cargar cemento.
Según información publicada en Primicias, el cargamento estaba escondido en un compartimento tras la sala de máquinas. En total, se encontraron 57 cajas con bloques de aproximadamente un kilo de cocaína cada una.
El barco transportaba a 20 tripulantes, todos de nacionalidad filipina, quienes permanecen bajo vigilancia mientras continúan las investigaciones.
Hasta ahora no se ha reportado ninguna detención formal, aunque las autoridades coreanas no descartan que existan vínculos con organizaciones internacionales de narcotráfico.
La droga incautada tiene un valor de mercado estimado en 700 millones de dólares y, según los reportes oficiales, podría haber alcanzado para distribuir una dosis a más de 67 millones de personas.
El hallazgo ha encendido las alarmas por el creciente uso de rutas marítimas entre América del Sur y Asia, pasando por Europa, como vía para el narcotráfico internacional.
Operación conjunta internacional
La incautación fue posible gracias a información proporcionada por agencias estadounidenses, incluyendo el FBI y el Departamento de Seguridad Nacional (HSI).
Un equipo conjunto de 90 oficiales surcoreanos, apoyado por unidades caninas, inspeccionó la embarcación y descubrió un compartimento oculto detrás de la sala de máquinas que contenía 56 sacos con un peso total de aproximadamente dos toneladas.
Investigación en curso
Los 20 tripulantes filipinos del M/V Lunita están siendo investigados por las autoridades surcoreanas. Hasta el momento, no se han presentado cargos formales, y los marineros permanecen a bordo del buque mientras se lleva a cabo la investigación.
Este decomiso destaca la creciente colaboración internacional en la lucha contra el tráfico de drogas y subraya la importancia de la vigilancia en rutas marítimas que conectan América Latina con Asia.
Además, pone de manifiesto la necesidad de fortalecer los controles en los puertos y mejorar la cooperación entre países para combatir el narcotráfico a nivel global.
El gobierno surcoreano ha decidido intensificar sus medidas de vigilancia tras el hallazgo, y anunció que revisará los protocolos de inspección aplicados a embarcaciones provenientes de América Latina.