**El Instituto promueve proyectos solares con apoyo estatal y limitaciones presupuestales**
Juan Rubio
Acatlán de Osorio, Pue.
El Instituto Tecnológico Superior de Acatlán de Osorio (ITSAO), liderado por el licenciado Alejandro Córdoba Guerrero, avanza en la implementación de energía solar como parte de una iniciativa estatal, para transformar espacios educativos en modelos de sostenibilidad.
Con un enfoque en innovación y responsabilidad ambiental, el proyecto busca integrar paneles solares y tecnologías limpias, aunque enfrenta desafíos financieros, que obligan a priorizar recursos entre nóminas docentes y planes académicos.
Desde su nombramiento como Director general del Instituto, Córdoba Guerrero —Licenciado en Derecho con posgrado en Gobierno y Administración— ha impulsado estrategias para vincular la formación académica con soluciones ambientales.
El pasado lunes 14 de abril, mediante un memorando interno, se solicitó a jefes de carrera y divisiones académicas presentar propuestas concretas, para equipar al plantel con herramientas y materiales que aprovechen energías renovables. “El objetivo es convertirnos en un referente científico y tecnológico en sostenibilidad”, afirmó el directivo.
La iniciativa, respaldada por el gobierno de Alejandro Armenta Mier, busca reducir el consumo eléctrico convencional y fomentar el aprendizaje práctico de los estudiantes. Sin embargo, los costos asociados a la instalación de paneles solares y equipos especializados representan un reto.
Córdoba Guerrero reconoció que, aunque el apoyo estatal es clave, los fondos disponibles se destinan prioritariamente a garantizar salarios docentes y proyectos educativos ya autorizados. “No podemos descuidar la base operativa, pero tampoco renunciar a innovar”, explicó.
Pese a las restricciones presupuestales, el Instituto Tecnológico mantiene diálogos con dependencias estatales, para explorar financiamientos adicionales. Además, se priorizarán propuestas que integren a los estudiantes en el diseño e implementación de sistemas solares, reforzando así su formación profesional. “La meta es trascender el aula: que los jóvenes vean en la energía limpia un campo de acción real”, agregó el Director general.
