Tratado global sobre pandemias: un acuerdo histórico en salud internacional

Ginebra, Suiza. – En un acuerdo histórico alcanzado el 16 de abril de 2025, más de 190 países miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) adoptaron el primer tratado internacional destinado a prevenir y responder de manera conjunta a futuras pandemias.

Tras la pandemia de 2020, muchos países se vieron incapaces de hacer frente por sí mismos al virus y a futuras pandemias. Por tal motivo, es indispensable que las naciones estén mejor preparadas para luchar contra futuras amenazas mundiales.

Este tratado es el resultado de más de tres años de negociaciones impulsadas por la experiencia global frente al COVID-19.

El nuevo instrumento legal, será sometido a ratificación en la próxima Asamblea Mundial de la Salud. En él, se propone una serie de compromisos orientados a fortalecer la cooperación internacional, reducir las desigualdades en el acceso a insumos médicos y evitar el acaparamiento de recursos durante emergencias sanitarias.

Un marco común frente a futuras pandemias

El tratado, de carácter vinculante solo en algunos aspectos, establece principios sobre:

  • Vigilancia epidemiológica
  • Transparencia en el intercambio de información
  • Fortalecimiento de los sistemas sanitarios
  • Acceso equitativo a vacunas, medicamentos y tecnologías sanitarias.

Uno de los compromisos más destacados es la creación de una red global de suministro, que garantice el acceso a recursos esenciales para todos los países, especialmente aquellos con menos capacidad de respuesta.

También se incluye un nuevo mecanismo para el reparto de beneficios derivados del uso de patógenos compartidos.

Bajo este esquema, las empresas que desarrollen productos a partir de estos materiales deberán reservar el 20% de su producción. El 10% en forma gratuita y el otro 10% a precio accesible para la OMS, con el fin de distribuirlos en situaciones de emergencia.

Compromisos voluntarios, pero un paso importante

Si bien muchas de las disposiciones del tratado no son obligatorias, expertos en salud global y organizaciones como Médicos Sin Fronteras han aplaudido el acuerdo como un avance significativo hacia una gobernanza sanitaria más justa.

“Este tratado no es perfecto, pero representa un cambio de paradigma en la forma en que el mundo se prepara y responde a las crisis sanitarias globales”, señaló Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.

Las negociaciones no estuvieron exentas de controversia. Países de altos ingresos expresaron reservas sobre la cesión de soberanía en temas relacionados con producción y distribución de medicamentos. Mientras que, los países del Sur Global insistieron en compromisos concretos que garanticen equidad en el acceso.

Diplomáticos participantes de las últimas negociaciones lamentaron que muchos de los compromisos asumidos en el acuerdo hayan sido de carácter voluntario.

Próximos pasos

El tratado será presentado formalmente durante la Asamblea Mundial de la Salud que se celebrará en mayo de 2025. Para que entre en vigor, deberá ser ratificado por al menos 60 países. La OMS espera que esto suceda en el transcurso del próximo año.

Por ahora, el acuerdo ha sido recibido como una muestra de voluntad política para evitar los errores del pasado y avanzar hacia una respuesta global más solidaria ante posibles amenazas sanitarias.

Compartir
Redacción Puebla
Redacción Puebla

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: ¡Contenido protegido!