- Tragedia vial por ebriedad en la carretera Izúcar-Cuautla
Redacción / Rijo, Puebla.
Una noche que parecía de diversión terminó en tragedia. La noche de este miércoles 4 de junio de 2025, tres jóvenes que circulaban en una motoneta Italika a exceso de velocidad resultaron gravemente heridos tras impactarse contra un vehículo en la carretera Izúcar-Cuautla, a la altura del crucero que conduce a Rijo.
De acuerdo con testigos y primeros reportes, los jóvenes, que viajaban en estado de ebriedad, se dirigían desde Tilapa sin las mínimas medidas de seguridad. A bordo de una motoneta Italika tipo scooter, ignoraron el alto en el crucero e ingresaron sin verificar si se aproximaba otro vehículo. Fue entonces cuando se estrellaron violentamente contra la parte trasera de un automóvil Nissan Versa de color rojo con placas RCZ-521-Z.
El golpe fue tan brutal que el coche fue sacado del camino y terminó girado en dirección contraria a la que circulaba. La motoneta quedó totalmente destruida, y en el sitio del accidente se encontraron varias botellas de alcohol, evidencia del estado inconveniente en el que viajaban los involucrados.
Elementos de emergencia acudieron al lugar para brindar atención médica. Los tres jóvenes fueron trasladados de urgencia al Hospital General de Izúcar de Matamoros. Dos de ellos fueron reportados como estables, mientras que el tercero permanece en estado delicado.
Las autoridades han comenzado las investigaciones para deslindar responsabilidades, mientras que los peritajes iniciales apuntan al exceso de velocidad, el consumo de alcohol y la falta de pericia como los principales factores del accidente.
Reflexión
Este lamentable hecho pone en evidencia los peligros de conducir bajo los efectos del alcohol, especialmente sin el equipo adecuado como el casco, indispensable para los motociclistas. La juventud, el exceso de confianza y la irresponsabilidad pueden convertir un trayecto común en una tragedia. Es urgente reforzar la conciencia vial entre los conductores, en especial los más jóvenes, sobre la importancia de manejar con responsabilidad, usar casco y nunca mezclar el alcohol con el volante o el manubrio. La vida, muchas veces, no da segundas oportunidades.
